Sanchís y Gallego no podían sacar el balón desde atrás con tranquilidad y el temperamental Schuster empezaba a desesperarse ante la falta de opciones para organizar el ataque. Pero no solo Gullit. El Atlético de Simeone, además de llegar hasta la final de la Champions, había conseguido ganar la Liga española esa temporada. Además, fue jurado de la primera edición de los Premios Ídolo, unos premios dedicados a reconocer el trabajo de los mejores creadores de contenido de nuestro país.