Las pasarelas han defendido el movimiento braless desde tiempo (imposible no recordar los diseños de Alexander McQueen) y los sujetadores más inverosímiles han moldeado la anatomía femenina en pro de su erotización (el cono puntiagudo de Madonna forma parte de los anales de la historia de la moda). En la parte frontal aparecerá un gráfico en una tonalidad más oscura que representa el plumaje de Quetzalcoátl, una serpiente emplumada de la mitología azteca.